Introspección sobre mi evaluación

                                                                         

 

Introspección sobre mi evaluación

La evaluación, he de confesar, ha sido siempre mi punto débil. En mis años de facultad no le presté la atención que merece, y solo con los años me he dado cuenta de la relevancia que tiene, y de lo complejo que es llegar a aplicar una completa, eficiente y continua evaluación. 

• ¿Cuáles son las prácticas y estrategias de evaluación que utilizas en tu trabajo docente?

Una evaluación inicial. tras un repaso ameno de los contenidos del curso anterior, es promovida por el colegio. Los resultados nos proporcionan información que sirva com punto de partida para el proyecto que iniciamos posteriormente. 

El día a día da para mucha observación, y habilidades y destrezas propias del trabajo cooperativo son un blanco fácil para la evaluación.

Mis estudiantes tienen registradas, y comprenden, la rúbrica de trabajo cooperativo. Yo mismo, utilizo esa rúbrica para completar una tabla con los nombres de las niñas y niños y cada una de las habilidades, incluyendo el esfuerzo diario. 

Presentaciones orales. Normalmente son las mismas presentaciones que después harán en el evento final. Tienen su rúbrica, tanto ara la información que hay en el soporte visual como para la oratoria. 

Al principio, durante y después del proceso, los niños y niñas tienen la oportunidad de evaluar su prorgeso en relación a los contenidos y la información que tienen que aprender durante el proyecto. Para ello, tienen tablas de este estilo:

Para los tests, suelo hacer una prueba cooperativa de dos pasos. En un primer paso, el equipo resuelve unas preguntas utilizando una estructura tipo Lápices al Centro. La calificación es grupal. 

Tras ello, les doy un tiempo para repasar entre todos. Les suelo proponer que si todos los miembros del equipo consiguen más de un 8 en la prueba individual, el equipo entero recibe medio punto extra. 

Finalmente, hacen la prueba escrita individualmente. 

El progreso diario en los trabajos del equipo o las tareas individuales también ofrecen datos que son valiosos para realizar una evaluación continua. 

Asimismo, practico la autoevaluación de equipos y co-evaluación, sobre todo para el aprendizaje cooperativo. 

• ¿Qué tipo de evaluación te proporcionan?

Las primeras me proporcionan una evaluación a tiempo real del progreso de los alumnos, en todos casos de forma cualitativa. Gracias a las rúbricas, tanto los niños y niñas como yo podemos saber en qué punto estamos y, sobretodo, qué hay que hacer para mejorar. 

Los tests y cuestionarios nos dan una evaluación cuantitativa, que no ofrece en muchos casos una visión real del aprendizaje del alumno. 

• ¿Te permiten ver a los aprendices actuando o solo replicando una lección que previamente has explicado? ¿Te permiten valorar un buen número de competencias en tus estudiantes?

Al hilo de lo anterior, parece que los procedimientos de evaluación que utilizo me dejan ver a los estudiantes actuando, presentando, construyendo, colaborando, interactuando y mostrando sus competencias en varias áreas. Las propias virtudes del trabajo cooperativo en conjunción con el ABP aflora múltiples inteligencias y competencias.

• ¿Qué nivel de satisfacción expresarías con tus estrategias de evaluación?

Honestamente, sigo teniendo la sensación de que se me escapan aún muchas oportunidades de evaluación. Con la cantidad de trabajo y la intensidad del mismo, muchas veces dejo la reflexión y la evaluación para el último lugar, y no debería ser así. 

He leído respuestas de compañeros y compañeras que dicen que llevan un cuaderno  con anotaciones diarias, y eso me parece imposible para mí. Debo aprender a organizar mejor mi tiempo para que esa evaluación esté en el centro del proceso.

Por otro lado, aunque utilizo las rúbricas mejor cada año que pasa, aún tengo que apoyarme más en ellas y recordarlas en más puntos del proceso, para tomar medidas sobre cómo continuar y fomentar que mis alumnos hagan lo mismo.